ĀæQUĆ TIPO DE DESEO SEXUAL TIENES EN TU RELACIĆN?
No nos engaƱemos, la convivencia reduce la pasión, hace que percibamos la exquisita compaƱĆa como algo seguro, y priorizamos otras tareas mĆ”s triviales. Incluso cuando no existe ningĆŗn compromiso, el cansancio acumulado por la sobre excitación de nuestro sistema parasimpĆ”tico aplaca la posibilidad de darnos un momento de encuentro.
ĀæRecuerdas la primera vez que compartiste intimidad con la persona que ahora convives? Probablemente en ese entonces todo era una novedad, tus sentidos estaban a flor de piel, y el deseo estaba presente en cada sutil acto que compartĆais.
Hoy sin embargo, en lugar de despertarte pensando en hacer el amor, estƔs pensando en hacer cafƩ, y eso es algo normal.
El preĆ”mbulo de los pĆ”rrafos anteriores tal vez te haya llevado a pensar que existen dos tipos de deseo sexual, y sĆ, asĆ es, estĆ”s en lo correcto.
El deseo espontĆ”neo es ese sentimiento de "no puedo esperar a arrancarte la ropa". Cuando empezaban a salir, un beso de buenas noches era suficiente para enviar deseo y excitación a travĆ©s del cuerpo y la mente, Āæno es asĆ? Sus lenguas se tocaron, y Ā”boom!, los relĆ”mpagos bioquĆmicos chocaron con el anhelo psicológico para crear una tormenta de pasión instantĆ”nea.
Estoy seguro de que esos momentos forman parte de tus recuerdos de oro de vuestra relación š
EscribĆ āempezabanā ātiempo pasadoā porque, segĆŗn diferentes investigaciones, la gran mayorĆa de las parejas pierden el deseo espontĆ”neo con el tiempo (como ya te comentĆ© es algo normal). Es como que tu jefe te pagara un 50% mĆ”s por hacer el mismo trabajo que estabas haciendo antes, poder, puede pasar, pero es extremadamente raro, y cuando pasa no debes perder la oportunidad.
El gran deseo olvidado, que es aquel que tenemos que incentivar en una relación duradera, es el deseo receptivo. Ahora bien, ĀæquĆ© significa receptivo? Significa que ocurre en respuesta a otra cosa. Es decir, tu jefe te va a pagar un 50% mĆ”s, pero porque mĆ”s a entregar mĆ”s valor a la compaƱĆa.
Voy a bajar un ejemplo a tierra. ĀæPuedes imaginarte un domingo de relajación despuĆ©s de una semana de infarto? Ese dĆa pongamos que te despiertas, te estires, y pienses en revisar las redes sociales mientras tomas un cafĆ©. Ninguno de los dos estĆ” pensando en sexo ni se siente excitado. En otras palabras, no hay deseo espontĆ”neo.
Sin embargo, ¿qué puede pasar si uno de ustedes dice: "Oye ¿qué tal si hacemos el amor?"
Eso serĆa aprovechar el potencial del deseo receptivo. Aunque no estĆ©s de humor, eliges estar abierto a explorar. QuizĆ”s comiences con un abrazo desnudo. Se acarician y mordisquean el cuello. Tal vez busques en el cajón de la cabecera un poco de aceite de masaje para rociar y acariciar. Mientras juegas, tu cuerpo y tu mente comienzan a prestar atención y a responder. TĆŗ creas conscientemente el deseo al actuar.
ĀæHas sentido que la pasión se acabó entre vosotros porque ya no habĆa deseo espontĆ”neo? Si es asĆ, anĆmate. No estĆ”s roto o con la persona equivocada. Ahora que comprendes el deseo receptivo, puedes optar por hacer que tu vida sexual sea mĆ”s consciente e intencional.
Uno de los muchos aspectos hermosos del amor a largo plazo es aprender nuevas formas de explorar juntos la danza del erotismo. No esperes a la pasión. Elige convertirte en la pasión personificada.
Quiero desafiarte a crear circunstancias a lo largo del dĆa que fomenten el deseo. EnvĆa una nota de lujuria a tu pareja. Abraza mĆ”s a menudo. Bromear un poco. SĆ© amable, y luego vayan a la cama juntos un poco mĆ”s temprano esta noche, o permanezcan en la cama un poco mĆ”s maƱana por la maƱana. DespuĆ©s de todo, el cafĆ© puede esperar.
Dime quĆ© te pareció el artĆculo. Me encantarĆ” saber que opinas al respecto.